En 2014, los números globales de los principales exportadores de granos y subproductos de la Argentina, sumando precisamente granos, harinas y aceites, indicaron que el líder fue Cargill, seguido por Bunge y Aceitera General Deheza (AGD), en ese orden.
Sin embargo, si se “desgranan” los números (valga la expresión), sale a la luz que en harinas (que en su gran mayoría son de soja y técnicamente se denominan “pellets”) el líder absoluto es AGD, la compañía cordobesa conducida por Roberto Urquía (foto).
La firma de los Urquía exportó en 2014 unos 4,35 millones de toneladas de pellets (harinas), casi en su totalidad de soja. La estadounidense Cargill se ubica, en este rubro, en el segundo lugar, apenas por debajo de AGD, con 4,28 millones de toneladas. Y el tercer lugar del podio lo ocupa otra firma argentina, Vicentín, el conglomerado que conduce Alberto Padoán, un conocido empresario con amplio predicamente en las instituciones agroindustriales de Rosario. Desde sus plantas se exportaron el año pasado 3,73 millones de toneladas de harinas.
En este producto y en el 2014, muy cerca de los tres líderes se ubicó el gigante Bunge, con 3,44 millones de toneladas. Entre 2 y 3 millones de toneladas embarcaron los de Oleaginosa Moreno, Dreyfus y Molinos Río de La Plata, ocupando respectivamente los puestos 5, 6 y 7 del ránking.
En el octavo y noveno lugar, con entre 1 y 2 millones de toneladas, se ubicaron Nidera y Noble, mientras que en el décimo aparece una empresa que sorprende en este rubro: nada menos que YPF, con 500.000 toneladas.
Fuente: Diario Clarín