Incertidumbre entre los productores maniseros Estadounidenses

Debido a las pérdidas sufridas durante la última cosecha y los nuevos aranceles, los agricultores de Georgia enfrentan una sensación de incertidumbre respecto de la próxima campaña, dice el economista agrícola de la Universidad de Georgia, Adam Rabinowitz.

 

Apenas cuatro meses después del huracán Michael, la devastadora tormenta de octubre que contribuyó con más de $ 2 mil millones en daños relacionados con la agricultura, los agricultores no están seguros de cómo proceder. El seguro de cosechas no cubre completamente esas pérdidas. Los agricultores también están preocupados acerca de las tarifas actuales y cómo impactarán los precios de los productos básicos que ya son extremadamente bajos.

 

"Tuvimos el programa de facilitación del mercado el año pasado para cubrir algunas de esas pérdidas que fueron el resultado del Comercio y el Secretario de Agricultura, Sonny Perdue, ha dicho que no quiere volver a hacerlo este año", dice Rabinowitz. "Si esas tarifas no se eliminan, entonces hay dudas sobre qué sucederá en términos de precios y si habrá algún otro tipo de apoyo gubernamental".

 

Aumento de los precios del maní

Rabinowitz dice que los productores de maní deben continuar reduciendo la superficie de maní si los precios van a mejorar. Georgia produjo 628,000 acres (254.000 hectáreas) el año pasado, en comparación con 714,168 acres en 2017. Otra reducción de 5 a 10 por ciento en acres de maní comenzaría a mover los precios favorablemente para los agricultores, dice.

 

La superficie de maíz podría aumentar este año dependiendo del futuro de las exportaciones de soja a China. Los precios se mantienen en USD $4 por bushel, aunque Rabinowitz cree que es probable un aumento de USD $4.50. 

 

Los precios del algodón son de 71 centavos por libra, muy por debajo de los 93 centavos por libra que los agricultores recibieron en junio pasado. Los productores de Georgia plantaron 1.45 millones de acres en 2018, un aumento de los 1.28 millones de acres en 2017. Si los precios del algodón continúan bajando, los agricultores pueden cambiar algunos de esos acres a cacahuetes.

Positivo y negativo en los costos de entrada

"Ciertamente hay esperanzas de precios más altos, pero no parece que haya un lado de la fila. Puede haber un poco de aumento en el maíz, pero el hecho de que veamos un aumento en la superficie cultivada en los Estados Unidos solo porque los precios subieron un poco significa que, en general, no va a ser tan impactante”. Rabinowitz dice.

 

Una noticia más desalentadora para los productores es que, mientras los precios se mantienen bajos, los costos de los insumos están aumentando.

 

“Estamos viendo algunos aumentos en los costos de fertilizantes, maquinaria, mano de obra, tasas de interés. Todos han subido un poco", dice Rabinowitz. "Los precios del diesel han bajado, por lo que ciertamente ayuda".

 

Los valores de la tierra se mantienen estables, con una pequeña disminución en el costo de la renta de la tierra irrigada. Esta es una buena noticia para los agricultores que necesitan capital cuando solicitan los préstamos de este año.

 

Información proporcionada por la Universidad de Georgia, Facultad de Ciencias Agrícolas y Ambientales con sede en Tifton.

 

Fuente: www.peanutgrower.com