Los productores de maní en China se quedan con las vainas vacías debido a que el clima extremo causa estragos en las cosechas en la nación más poblada del mundo.
Las vainas sin grano son una consecuencia de la alternancia de sequías y lluvias excesivas durante los períodos clave de siembra y desarrollo. Esas son malas noticias para China, el mayor productor del mundo, después de que los agricultores ya redujeron la superficie de cultivo. Las vainas vacías son un factor que podría provocar que la producción de maní caiga hasta un 30% esta campaña, según los analistas.
"Nunca me había encontrado con algo así en años anteriores", dijo Song, un comerciante de maní en la provincia de Shandong, donde acaba de comenzar una cosecha retrasada.
China representa un tercio de la producción mundial de maní
Producción de maní por principales países
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La difícil situación de los productores se puede ver en un video de campos de maní devastados por la sequía que circula en las redes sociales. Publicado por “Brother Peanut” en Shandong hace tres meses, cuando parte de China ya estaba luchando con precipitaciones insuficientes, muestra una gran extensión de tierra que solía estar sembrada con maní, ahora en su mayoría estéril y salpicada de una cosecha anormalmente pequeña.
El maní se convirtió en la última víctima debido a que el clima extremo afecta los mercados agrícolas chinos durante el período crucial de la cosecha. Sichuan sufrió su peor sequía en 60 años cuando las temperaturas abrasadoras calcinaron las provincias del centro y suroeste, mientras que las inundaciones inundaron el noreste.
Otros cultivos sufrieron daños similares en todo el mundo este verano, lo que exacerbó la inflación alimentaria que se ha apoderado del mundo. El calor abrasador marchitó la cosecha de maíz en los EE. UU., dejando algunos tallos sin mazorcas. Los girasoles se están marchitando en Europa, la tierra de Van Gogh, gracias a una sequía única en una generación.
El humilde maní, el cuarto cultivo de semillas oleaginosas más grande del mundo, generalmente es resistente a la sequía. Pero la leguminosa necesita calcio para crecer. Si el suelo está demasiado seco o inundado, provocará una pérdida de calcio, lo que dificultará que las raíces de la planta absorban lo suficiente. El resultado: una vaina sin grano.
"Las altas temperaturas y la sequía, o demasiada humedad en el suelo, pueden llevar a que el maní se vacíe", dijo Jiang Ying, analista de Huatai Futures , que estima una caída del 20 % al 30 % en la producción total de maní de China esta temporada.
Seguridad alimentaria
Cualquier caída considerable en la producción de maní en China, que produce un tercio de la producción mundial, podría hacer subir aún más los precios mundiales de las semillas oleaginosas. También frustraría el impulso de Beijing por la autosuficiencia en las semillas oleaginosas, parte de un impulso general de seguridad alimentaria, después de que la pandemia de covid-19 y las relaciones agrias con los principales socios comerciales amenazaran el suministro constante del mercado extranjero.
Beijing ha dicho que no escatimará esfuerzos para mejorar la capacidad de semillas oleaginosas, con el objetivo de producir más de 19 millones de toneladas de maní para 2025, según el plan quinquenal del gobierno.
Ahora, ese objetivo parece muy lejano.
Incluso antes del mal tiempo, el escenario estaba preparado para una mala cosecha. Los bajos precios del maní habían empujado a muchos agricultores a cambiar a otros cultivos como el maíz y las hortalizas, en busca de mejores ganancias y un trabajo más fácil.
Superficie decreciente
Aquellos que decidieron quedarse con los cacahuetes descubrieron que la tierra estaba demasiado seca para sembrar cuando llegó la sequía en abril y mayo. Bajo el doble golpe, la superficie cultivada de maní se desplomó en más del 30% en algunas de las principales áreas de producción.
Fuente: Bloomberg
Precios del Maní
