Con una superficie total que según dicen estará en los mismos niveles que la campaña pasada, la que avanzó temprano fue la soja ganándole hectáreas al maíz que deberá esperar hasta diciembre, una fecha que el productor de esta región eligió desde hace varios años porque le asegura una buena producción.
En diálogo con TodoAgro el ingeniero agrónomo Darío Boretto, técnico del INTA General Cabrera expresó: “Hay una clara intensión de bajar el área de maíz por problemas básicamente coyunturales, pero esperemos que esto cambie porque es un cultivo muy importante para la rotación. Lógicamente una baja en maíz trae aparejado un aumento en soja porque al campo hay que sembrarlo. No obstante el productor desde hace unos cinco años se tira a sembrar maíz en diciembre porque aunque pueda perder un poco de rinde se asegura la producción”.
También aseguró que en el caso del maní la superficie anual habitual está cubierta por lo que no ve grandes diferencia con respecto a años anteriores. “Dentro de las expectativas para esta campaña manisera hay una variable que juega un rol fundamental y que no está en manos del productor, el clima. Como todos sabrán en estas últimas semanas ha habido tormentas muy intensas sobre todo en la región de Río Cuarto con granizadas que afectaron muchas hectáreas principalmente sembradas con soja. En el caso del maní, además debemos decir que es un cultivo muy susceptible a enfermedades fúngicas tanto foliares como de suelo, siendo estas últimas las de muy difícil control. Si tenemos en cuenta que este tipo de enfermedades se desarrollan mejor en ambientes húmedos y con altas temperaturas basta que llegue el calor para que esto suceda”.
Algunas de las primeras granizadas que cayeron en la región de General Cabrera no tuvieron impacto en el cultivo de maní ya que el mismo se encontraba recién implantado y la baja temperatura del suelo hizo que las plantas no emergieran. En el caso de los lotes que fueron sembrados a principios de octubre, las plántulas recién emergían por lo que la piedra no le hizo daño.
Rotación y cultivos de cobertura
“Aquí el maní vendría a ocupar espacios que en otra región ocupa la soja. Con la diferencia de que hoy prácticamente no existe lote de maní que no tenga cultivo de cobertura. Esto es importante porque además de conservar el suelo son buenos consumidores de agua y al deprimir las napas dejan los perfiles menos saturados. Lógicamente estos cultivos de cobertura no se cosechan, sino que se queman previo a la encañason o llenado de grano, de modo tal que no consuman nutrientes que serán beneficiosos para el cultivo que viene”.
Malezas
Un problema que merece un capítulo aparte en esta campaña. Según algunos referentes de compañías privadas, las malezas resistentes condicionan los precios de los alquileres. En respuesta a nuestro planteo el ingeniero Boretto dijo: “Yo como productor si tengo que salir a alquilar un campo que esta tapizado de malezas resistentes, lo pienso dos veces. En primer lugar porque eso trae aparejado mayores costos que los habituales para tratarlas y por otro puedo tener notables pérdidas de producción en caso de no controlarlas a tiempo. Hay una realidad, este año los barbechos en algunos casos no se hicieron en tiempo y forma, y sabemos que llegar tarde significa más costos”.